¿Se pueden meter en el mismo sector a los medios tradicionales y a los social media?

El otro dí­a me llamó poderosamente la atención un post que le leo a Toni Muzi Falconi, un profesor y profesional de las Relaciones Públicas italiano, en el que preguntaba si se deben unir en una misma asignatura el estudio de los medios de comunicación tradicionales y los social media ( medios participativos) a la hora de plantear un plan para los estudiantes.

El tema que Falconi somete a discusión me pareció del todo adecuado hasta el punto que es incluso pertinente planteárselo a un nivel más global. La pregunta entonces serí­a: ¿es adecuado incluir a los medios participativos o social media en el mismo paquete que los medios tradicionales como son la radio, la tele y la prensa. Están todos en el mismo sector?

Particularmente, considero que son dos mundos diferentes, y por lo tanto, no es conveniente incluirlos dentro de un mismo paquete pues los nuevos medios, dentro de internet, aportan usos que dejan muy atrás el esquema muy básico de un medio ( como la televisión, por poner un ejemplo) que pone los contenidos a circular en una sola dirección: del emisor a los receptores. Al fin y al cabo ésa es la misma estructura de funcionamiento que existe desde que se tiene constancia que aparecen los medios de comunicación hace muchos siglos atrás.

La evolución adquirida por internet es, en comparación con lo visto hasta ahora, tan diferente y completa que ese ‘modus operandi antiguo’ explota por los aires. Ya nada es igual. El nuevo panorama es tan rico que lo que estamos viendo hoy en dí­a es, solamente, la punta del iceberg. Mi posicionamiento proclive a separar los medios tradicionales de los medios participativos, dentro de internet, está trufado de evidencias y algunas interrogantes.

Realmente internet es el medio de medios, pues ha llegado a un punto de su desarrollo tal que realmente no es un medio que haga una sola tarea, ( como la radio hace radio únicamente ) las hace todas. Sin entrar en lo que son operaciones de negocio, gestiones empresariales, eficiencias, productividad, etc, en internet tenemos periódicos, radios y televisiones. Pero es que, desde hace diez años a esta parte, y en lo que se refiere exclusivamente al apartado de medios, en internet hemos entrado en la era de la web 2.0 que nos aupa a un escenario realmente revolucionario como mucha gente, dí­a a dí­a, está comprobando por la ví­a de los hechos.

Efectivamente, la web 2.0 añade una serie de valores sin precedentes. Desde el momento en el que las nuevas herramientas empiezan a funcionar (los blogs, redes, microblogging, podcast, video-blogs…) se constata un hecho tremendamente importante: ya no nos encontramos ante medios informativos como son de hecho los medios tradicionales, aunque se le conozcan como medios de comunicación. Con la web 2.0 el emisor y el receptor adquieren un plano de igualdad y pueden dialogar, mientras que en las plataformas tradicionales la información circula, como es patente, en la única dirección del emisor al receptor, sin diálogo posible salvo a tí­tulo testimonial (cartas al director).

El paso de la era de la información, propia de los medios tradicionales, a la era de la comunicación, que realmente promueven los medios participativos, nos plantea interrogantes con un atractivo enorme. Entre ellas destaco la relativa al control de los contenidos, que tan ampliamente se debate desde hace años para llegar a un conclusión obvia: hay que desterrar, por imposible, cualquier intento de que los contenidos que se ponen en circulación estén bajo el control exclusivo de unos intereses concretos.

En el campo especí­fico de la Comunicación y Relaciones Públicas, Heather Yaxley dice algo, que traduzco, en lo que lleva ‘más razón que una santa’. Respecto a cuál debe ser la involucración de las Relaciones Públicas como disciplina en este debate sobre el control de la información, afirma lo siguiente:

«Prestemos menos atención a la manera en la que las Relaciones Públicas puedan controlar o dominar la discusión y más en cómo gana su derecho a involucrarse en las conversaciones»

Tras este recorrido de ideas engarzadas, llego al punto de partida para ratificarme en la idea- por cierto contraria a la de Falconi- de que no podemos unir en el mismo saco a los medios participativos con los tradicionales. Tienen similitudes, pero muchas más razones por las que estar en lugares diferentes, al menos de momento. En este sentido, parece bastante razonable pensar que- como ya ocurre- los medios tradicionales se hagan cada vez más interactivos. Y esa dinámica hunde sus raí­ces en internet, que es el gran medio de medios, en el que está la web 2.0, pero también la radio, la tele y la prensa. Así­ es, internet es el marco global en el que progresivamente se irá avanzando hacia terrenos insospechados, dada esa capacidad infinita para construir un mundo más y más conectado en torno al cual irá funcionando todo.


Comments

  1. […] ¿Se pueden meter en el mismo sector a los medios tradicionales y a los social media?www.pre.eventoblog.com/2009/04/%C2%BFse-pueden-meter-en-el-mismo… enviado por juanlopes […]