19:00 de la tarde, primer día de EBE2010. En la sala ‘Paralela II’ del hotel Barceló no cabe un alfiler. Poco antes del comienzo del taller, Mauro Fuentes, también conocido como @fotomaf, fotografiaba a los asistentes en una habitación llena a medias. Ahora los más tardones pelean por una silla libre.
El fondo de la sala está lleno de gente en pie que sigue las enseñanzas de un nervioso profesor que “esperaba llenar las tres primeras filas” y ha logrado comprimir mil conceptos en una hora de taller. Un taller titulado ‘La luz en el retrato’ y en el que ha hablado de dos aspectos clave: la composición y la iluminación.
Tras la pregunta “¿Cuántos hacen fotos de manera habitual?” a la que responde un bosque de manos alzadas, las explicaciones van tomando fuerza. @Fotomaf habla de factores a tener en cuenta a la hora de tomar una fotografía, como el encuadre y la importancia del entorno, nos ilustra sobre los planos de enfoque, nos da pistas para mejorar los retratos… “lo ideal es que los ojos estén siempre enfocados”, “hay que tratar de desbloquear al modelo, que las manos y piernas no estén paralelas”… o aboga por el uso de complementos relacionados con la persona para dar dinamismo al retrato.
Las sugerencias saltan paralelas a las explicaciones, como lo hacen los flashes simpáticos que ha instalado en el estudio anexo, cada vez que algún asistente inmortaliza el momento, cegando al resto de la sala.
Por supuesto, y haciendo honor al título del taller, nuestro profesor también habla de la iluminación. @Fotomaf explica las diferencias entre las luces duras y las difusas, y cómo suavizar las primeras. Da remedios (unos más caseros que otros) para rebotar la luz, habla de la dispersión y la temperatura lumínica. Y, sobre todo, subraya la importancia de disparar en RAW y de saber leer el histograma (que hay que poner en modo RGB). “Utilizadlo (el RAW), habrá muchas fotos a las que les podréis sacar más partido, se puede recuperar más información a la hora de revelar”.
Tras explicar dos tipos básicos de esquema de luz (el ‘Paramount’ y el Rembrandt’) y algunas modificaciones de los mismos, promete subir el slideshare para que los alumnos que abarrotan la parte trasera de la sala puedan ver mejor la presentación que había preparado para el taller. Su exposición finaliza y da paso a una muy breve ronda de preguntas.
La sala estalla en un aplauso. Al final, nadie ha presentado síntomas de epilepsia ni de ceguera temporal. La gente se arremolina para llevarse un de recuerdo en forma de avatar con el que llenar el timeline del resto y poder decir a los amigos “mira, mira, me lo ha hecho @fotomaf…”. Foto o no foto, todos los asistentes salen del taller con nuevas ideas. El taller ha sido un éxito rotundo. Señores, vamos a practicar.