Javier Padilla se sale de su trabajo de periodista, tras doce años. Tenía puesto indefinido, buen salario pero, como en la típica historia que nos cuentan mil veces hoy en día, quería emprender su sueño personal.
El cambio a la historia viene cuando fija su objetivo al otro lado del charco. Lanzar una startup sevillana en Estados Unidos. “En dos horas en Nueva York vi a más inversores grandes que en dos años en España”, asegura. Nos va a contar cómo se hace eso de llevarse tu empresa tecnológica al Silicon Alley (que es como es conocida la zona de concentración de startups de NY), qué cosas les gustan de nosotros, qué hay que cambiar y dónde están las claves para intentar salir victorioso.
Patricia Carmona